
Se de antemano que la opinión que voy a exponer no es compartida por todos mis compañeros, aunque sí con algunos de ellos, y sin embargo creo que no voy desencaminado.
Es evidente que conseguir una película tan redonda como Casino Royale, era una misión complicada, casi inalcanzable, pero creo sinceramente que en ningún momento fue esa la intención de los realizadores de quantum.

Así la pelicula navega superficialmente sobre la historia de fondo, el director renuncia de una forma evidente a elaborar una trama profunda, sino que relata los acontecimientos, con espectacularidad, pero también obviando sorpresas o giros argumentales. La película resulta lineal, en ocasiones lenta, trufada de escenas de acción trepidante, en ocasiones demasiado, pero pobre argumentalmente. En este aspecto se apuntan hilos que quizás nos vuelvan a regalar grandes momentos en el futuro(¿hacia una nueva spectra?), pero no se desarrollan.
La configuración de los personajes es seguramente lo peor de la película. la transformación que Bond sufre en Casino Royale no es adecuadamente desarrollada en el film, convirtiendo al personaje poco menos que en una maquina de matar, pero más cercano a un Bourne, que a un personaje atormentado u obsesionado por la venganza. Bond pierde el encanto clasico, pero no alcanza la intensidad emocional y fuerza que tenía en la anterior película.
En definitiva, entretenida pero pobre argumentalmente. La conclusión es que los creadores han querido construir una secuela de CR, una película puente, pensando más en una tercera parte, que en darle una entidad propia a ésta.
Lo mejor: los primeros quince minutos.
Lo peor: argumento vacuo y previsible; la interpretación y el doblaje de Olga Kurilenko
Nota global: 6,5
Es evidente que conseguir una película tan redonda como Casino Royale, era una misión complicada, casi inalcanzable, pero creo sinceramente que en ningún momento fue esa la intención de los realizadores de quantum.

Así la pelicula navega superficialmente sobre la historia de fondo, el director renuncia de una forma evidente a elaborar una trama profunda, sino que relata los acontecimientos, con espectacularidad, pero también obviando sorpresas o giros argumentales. La película resulta lineal, en ocasiones lenta, trufada de escenas de acción trepidante, en ocasiones demasiado, pero pobre argumentalmente. En este aspecto se apuntan hilos que quizás nos vuelvan a regalar grandes momentos en el futuro(¿hacia una nueva spectra?), pero no se desarrollan.
La configuración de los personajes es seguramente lo peor de la película. la transformación que Bond sufre en Casino Royale no es adecuadamente desarrollada en el film, convirtiendo al personaje poco menos que en una maquina de matar, pero más cercano a un Bourne, que a un personaje atormentado u obsesionado por la venganza. Bond pierde el encanto clasico, pero no alcanza la intensidad emocional y fuerza que tenía en la anterior película.
En definitiva, entretenida pero pobre argumentalmente. La conclusión es que los creadores han querido construir una secuela de CR, una película puente, pensando más en una tercera parte, que en darle una entidad propia a ésta.
Lo mejor: los primeros quince minutos.
Lo peor: argumento vacuo y previsible; la interpretación y el doblaje de Olga Kurilenko
Nota global: 6,5
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